Hay sitios a los que solo vas a comer, como simple trámite de supervivencia nutricional o como capricho placentero pero donde la comida es lo único importante, y hay otros en los que además de la cocina, encuentras otras cosas que convierten una cena en uno de los mejores momentos de la semana. Let’s Go no es solo un bar donde comer o cenar bien, es también el punto de partida perfecto para empezar con buen pie una noche de juerga; es el lugar donde convergen la ilusión y los nervios previos a un concierto en Wah Wah, es el carisma y la simpatía de Tono, su propietario; es la música en directo que envuelven sus paredes y la mejor terraza del Cedro donde juntarse con los amigos; es el bar donde puedes encontrarte a la banda que hora y media más tarde te hará vibrar desde el escenario.
Por eso, siempre apetece pasar por el Let’s Go, por eso y porque no es frecuente comer bien en una zona llena de bares fritangueros. Pero como no solo de noche vive el hombre, a mediodía, Tono prepara platos de cuchara que hacen la competencia a la mejor cocina casera de nuestras queridas progenitoras. Cocido completo todos los viernes (con bebida y postre por 9,95 €), estupendos arroces (arroz al horno, paella de pato y setas, arroz de alcachofas, costillas y coliflor) o fideua, una de sus especialidades, por 5 euritos con bebida. Imposible no caer rendida.
Cae la noche. El volumen de la música sube y el alcohol fluye generoso. Hay que preparar el estómago para lo que venga. Un vistazo a la carta de Let’s Go para decantarnos por alguna de sus tapas (hummus, guacamole, bravas…), todas ricas. Aún recuerdo la ventresca en escabeche que probé y el embutido de Ontiyent con tomate, deliciosos prolegómenos de una noche memorable. Hamburguesas y bocadillos para completar y postres que valen la pena probar. Y antes de adentrarse en la jungla noctívaga, imprescindible brindar con un chupito que sirva de inicio bautismal para las siguientes horas.
Gusto y oído. Oído y gusto. Let’s Go es la mejor combinación para disfrutar de ambos sentidos, donde armonía, melodía, sintonía y composición confluyen para generar un resultado de sabores difícil de olvidar.
Nota media: 7
Precio medio: 10-15 €
Para ir con: cualquiera con quien sepas que pasarás una gran noche